En una semana de calor intenso, muchos bonaerenses se vieron afectados por cortes de luz y agua, que desembocaron en protestas espontáneas y hasta en denuncias penales para con Edesur. Pero puntualmente, algunos municipios estuvieron 72 horas sin agua por deficiencias en la planta de energia quilmeña.

La Estación Elevadora Quilmes estuvo paralizada durante tres días, dejando sin suministro de agua a cuatro municipios de zona sur. A última hora del viernes la planta fue puesta nuevamente en marcha tras  el trabajo de los equipos técnicos en las tareas de reparación de la subestación eléctrica.

A través de un comunicado, desde Agua y Saneamientos Argentinos (Aysa) precisó que a las 22, operarios de la compañía pusieron en marcha las primeras bombas de la estación para inyectar agua a la red.

El director de Plantas y Establecimientos de AySA, Danilo Zanata, explicó que "es la primera vez que sucede un corte de esta magnitud. La parada de la estación duró casi 72hs" y afectó a las localidades de Almirante Brown, Avellaneda, Lomas de Zamora y Quilmes.

Al tiempo que aseguró que “el sistema de distribución de agua potable que abastece a miles de usuarios, se irá restableciendo de manera paulatina durante las próximas horas". Y detalló que "ahora resta que el conducto principal, las redes primarias y secundarias vuelvan a llenarse y que el sistema logre presurizarse."

Cabe destacar que desde la empresa advirtieron que mientras se realiza la puesta en marcha del sistema es posible que se registre presencia de turbiedad debido al arrastre de sedimentos que pudieran encontrarse en las cañerías, luego de haber estado vacías por tres días.

Sin embargo, se indicó que se "garantiza la potabilidad del agua a partir de estrictos controles de calidad" y recomendó "en caso en que se registre algún grado de turbiedad en el agua que llega a los domicilios, abrir las canillas y dejarla correr unos minutos".